A lo largo de los últimos 12 meses, 94 trabajadores de los medios de comunicación han sido asesinados, la cifra más alta desde el 2015, según la información de la Federación Internacional de Periodistas (FIP).
De acuerdo con esta organización, hasta el 21 de diciembre de este año el país que registró más homicidios de periodistas fue Afganistán, con 16, seguido por México, donde a causa del crimen organizado —calificado por la FIP como "experto en asesinato de periodistas"— fueron asesinados 11 profesionales de la información.
Las cifras contabilizadas por la FIP revelan un aumento de 12 muertes respecto al año anterior, lo cual tilda de "crisis de seguridad" para el periodismo. En este sentido, la organización destaca el asesinato del periodista saudita Jamal Khashoggi en el consulado de su país en Estambul (Turquía), perpetrado el pasado 2 de octubre.
El presidente de la FIP, Philippe Leruth, explicó que ha pedido a la ONU que adopte en su Asamblea General la Convención sobre seguridad y protección de periodistas que presentaron en octubre a modo de "respuesta concreta a los delitos cometidos contra los periodistas en un marco de total impunidad".
La organización, también incluyó en el listado a Yemen (9 periodistas asesinados), Siria (8), y la India (7), entre otros países.