El planeta se habría 'tragado' rocas de la corteza terrestre durante un millón de años
Los análisis geológicos tienen una ausencia: no hay registros de la corteza terrestre entre 250 millones y 1.200 millones de años atrás. Sin embargo, los especialistas habrían encontrado una explicación.
Liderados por Brenhin Keller, del Centro de Geocronología Berkeley de la Universidad de California (EE.UU.), estudiaron la composición del Gran Cañón de Colorado y así concluyeron que en ese período la corteza terrestre fue cubierta y erosionada por glaciares, antes de ser bañada por los océanos y 'tragada' por la propia Tierra en las zonas de subducción entre placas tectónicas, publicó Proceedings of the National Academy of Sciences.
¿Cómo llegaron a esa conclusión? El Gran Cañón es un reservorio geológico, cuyas rocas conservan la huella de la historia del planeta y es allí donde faltan registros, en lo que se denomina 'La Gran Inconformidad'.
Lo que ocurrió en ese período es que la Tierra estuvo mayormente cubierta de hielo, en la era de la glaciación global de hace unos 700 millones de años. Mientras el planeta fue esa 'bola de nieve' es que, para los investigadores, los glaciares se movieron y cubrieron las rocas.
Esto también le permitió al planeta deshacerse de muchos cráteres y conseguir así una superficie más suave.
Piedras que guardan la historia
En su estudio, los especialistas analizaron las piedras preciosas llamadas 'circonitas', que al cristalizarse conservan las condiciones geoquímicas del medio, información que puede ser recogida por los científicos mucho tiempo después.
Así observaron un importante cambio geoquímico al comienzo de las glaciaciones, mientras que los isotopos de oxígeno dentro de las circonitas muestran que la corteza terrestre sufrió cambios hidrotermales a baja temperatura. Esto significa que fue la corteza, en contacto con el agua y el hielo, la que fue subducida por las placas tectónicas.
"Creo que tenemos gran evidencia para apoyar esa extraordinaria afirmación", expresó Keller. Sin embargo, aún se necesitan más estudios para confirmar su hipótesis.