La explosión de un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) este viernes en el municipio de San Juan del Río, en el estado de Querétaro (centro de México) se debió a la toma clandestina de combustible, según comunicó la empresa estatal a través de Twitter.
El suceso se registró en horas de la tarde minutos después de que otra fuerte explosión de un ducto en Tlahuelilpan, en el estado vecino de Hidalgo, provocara la muerte de al menos 21 personas y dejara más de siete decenas de heridos.
Asciende a 76 el número de fallecidos en la explosión de un ducto en México
De acuerdo con Pemex, no existe riesgo para la población a causa del estallido en Querétaro, ocurrido en una zona deshabitada, y no se reportan heridos. La empresa comunica que para la media noche (hora local) el fuego había sido sofocado.
Explosión en Hidalgo
Pemex también había atribuido la explosión en Hidalgo al 'huachicoleo', como se conoce popularmente el robo de combustible en el país latinoamericano.
Según la información preliminar, el estallido se produjo en una sección del ducto que desde hacía un par de horas presentaba una fuga de combustible, y varias decenas de personas que se habían acercado a recolectar combustible quedaron atrapadas en el fuego.
Las explosiones se producen menos de un mes después de que el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, anunciara una nueva estrategia para combatir el robo de combustible en Pemex, que genera pérdidas anuales de cerca de 2.500 millones de dólares.