El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, aseguró este miércoles en Davos, Suiza, que si los movimientos "sospechosos" en las cuentas de su hijo, Flavio Bolsonaro, se confirman, "tendrá que pagar" por sus acciones.
"Si por casualidad cometió un error y fue comprobado, lo lamento como padre, pero tendrá que pagar el precio por aquellas acciones que no podemos aceptar", dijo Bolsonaro en una entrevista exclusiva a la agencia de noticias Bloomberg, en Davos, donde participa en el Foro Económico Mundial.
Se trata de la primera vez que el presidente de Brasil realiza un comentario sobre el caso de su hijo, que asumirá el cargo como senador por Río de Janeiro en febrero.
Hora después de la entrevista, Bolsonaro canceló la conferencia de prensa que tenía previsto ofrecer junto a varios de sus ministros. Sus asesores explicaron que el presidente necesita descansar, ya que el próximo lunes, día 28, será sometido en Brasil a una cirugía para retirarle la bolsa de colostomía que lleva desde que fue apuñalado en septiembre durante un acto callejero en plena campaña electoral.
Presión
El primer viaje del mandatario brasileño al extranjero se ha producido en un momento en el que en Brasil aumenta la presión contra Flavio Bolsonaro. El caso del vástago del presidente ocupa las portadas de los principales periódicos nacionales.
El Consejo de Control de Actividades Fiscales de Brasil (COAF), en el marco de una investigación de la Fiscalía de Río de Janeiro sobre una posible red de sobornos en la Asamblea Legislativa, detectó ingresos "sospechosos" en las cuentas del senador electo.
Según el COAF, entre junio y julio del 2017, Flávio Bolsonaro recibió 48 depósitos por un total de 96.000 reales (unos 24.000 dólares), que se llevaron a cabo a través de los cajeros automáticos de la Asamblea Legislativa de Río de Janeiro. El COAF, que no pudo detectar la procedencia de los depósitos, asegura que el hecho de realizar los pagos en partes puede indicar la intención de ocultar la fuente del dinero.
En el mismo documento, se advierte que el hijo del mandatario de Brasil pagó también un título bancario de la Caixa Económica Federal por un valor de más de un millón de reales (más de 265.000 dólares). El organismo no pudo identificar al beneficiario.
El senador electo, que dice "ser víctima de una campaña difamatoria", aseguró que los depósitos corresponden a la compra y venta de un apartamento y, según él, al ser una vivienda sobre plano lo gestionó primero con la constructora y cuando se terminó buscó la financiación de la Caixa Económica Federal.
Ya a principios de diciembre, su nombre protagonizó las portadas de la prensa cuando el COAG detectó movimientos "atípicos" por un valor de 1,2 millones de reales (307.000 dólares) en las cuentas de Fabricio Queiroz, su chófer y exasesor.
La semana pasada, el Tribunal Federal Supremo de Brasil ordenó suspender temporalmente la investigación de Queiroz, tras un recurso de amparo presentado por Flavio Bolsonaro.