El piloto Dave Ibbotson, que transportaba al futbolista argentino Emiliano Sala en una avioneta que despareció el lunes pasado, no tenía licencia comercial para volar.
Según publica el tabloide británico The Sun, Ibbotson, de 59 años y con cuatro hijos, solo contaba con una licencia privada. Además,hacía frente a unas deudas que rondaban los 23.500 dólares y trabajaba como fontanero y disc-jockey.
El Cuerpo de Investigación de Accidentes Aéreos (AAIB) de Reino Unido dijo que investigará si el viaje se realizó dentro de los marcos de la legalidad.
"El asunto de si el viaje se realizó sobre una base comercial [Ibbotson no hubiese tenido licencia] y el nivel de calificación del piloto, se analizará en la investigación", explicó una fuente de la Autoridad de Aviación Civil.
Los equipos de rescate anunciaron el jueves que daban por terminada la búsqueda de la avioneta extraviada cuando atravesaba el canal de la mancha.
El piloto y el futbolista viajaban en el aparato desde Nantes (Francia) a Cardiff (Reino Unido), donde Sala se disponía a integrar su nuevo club, el Cardiff, que pagó unos 17 millones de euros por su fichaje, el más caro de la historia de la institución.
La noche misma del lunes, Sala fue a despedirse de sus compañeros del Nantes francés, y después se subió al aparato para regresar a Cardiff, donde tenía previsto empezar una nueva etapa profesional. El martes iba a ser su primer día en el equipo de la Premier League.
"Un poco oxidado"
El periódico asegura que, antes de emprender el vuelto, Ibbotson dijo a sus amigos en un mensaje que se sentía "un poco oxidado" con el Sistema de aterrizaje instrumental (SIL) del aparato.
"Siempre pensé que era mejor fontanero que piloto", dice un amigo de Ibbotson, mientras explica que el piloto tenía miles de horas de vuelo, pero en viajes como el transporte de paracaidistas. "Nunca le consideramos un piloto, él solo controlaba el avión cuando subían los paracaidistas", sentencia.
Por su parte, Mark McKay, que participó en la negociación entre Cardiff y Nantes para el fichaje de Sale, confirmó que él fue quien se encargó de organizar el vuelo.
"No se detengan"
Después de que los equipos de rescate informaron de que finalizaban la búsqueda, la hermana del futbolista, Romina Sala, pidió, en un emotivo mensaje a través de las redes, que no se detengan.
"Pido, por favor, a todos que (...) me ayuden con la búsqueda. Tenemos que encontrarlo. Pongamos fuerzas, por favor. Él está vivo. Se lo pido, por favor, que me ayuden", pidió entre sollozos.