El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, a través de su Departamento de Información y Prensa, se ha pronunciado respecto a los últimos hechos en Venezuela, señalando que "son cada vez más alarmantes".
La Cancillería rusa ha citado "las demandas de ultimátum" de varias naciones europeas para que las "autoridades legítimas de Caracas organicen en un plazo de ocho días elecciones 'democráticas, limpias y transparentes'". Según el Ministerio, estos requisitos están acompañados por "la amenaza de reconocimiento" del líder de la oposición, Juan Guaidó, como el nuevo jefe de Estado.
De acuerdo con el Ministerio de Exteriores ruso, llamó la atención "la sincronización y el montaje" de estos anuncios por parte de las autoridades europeas, ya que se produjeron unas horas antes de que Estados Unidos convocara a una discusión sobre la situación en Venezuela en el Consejo de Seguridad de la ONU.
"Detrás de todo esto, es claramente visible la batuta de Washington", subraya el comunicado.
Según la Cancillería rusa, la situación en Venezuela "se calienta artificialmente desde el exterior" y "se estimulan los estados de ánimo más radicales". En ese sentido, las autoridades rusas instan a que "la interferencia cínica y abierta en los asuntos internos de un Estado soberano termine".
"Por nuestra parte, reafirmamos nuestra disposición a contribuir a encontrar un entendimiento mutuo entre las fuerzas políticas responsables de Venezuela con el fin de garantizar la paz y tranquilidad internas y resolver rápidamente las tareas sociales y económicas urgentes. Estamos listos para interactuar con otros Estados que comparten este enfoque", concluye el comunicado.