Un informe del Mando de la Coalición Internacional contra el Estado Islámico liderada por Estados Unidos refleja que sus ataques en Siria e Irak causaron la muerte de "al menos 1.190 civiles" entre 2014 y 2018.
En verano de 2014, EE.UU. y otros países occidentales y árabes lanzaron la operación Resolución Inherente para poner fin a la expansión de ese movimiento terrorista en Siria e Irak.