Francia retrasa el informe sobre misteriosos casos de bebés nacidos sin brazos

La agencia de salud pública de Francia retrasó por razones desconocidas la publicación de un informe sobre una investigación acerca del número anormal de bebés que nacen sin brazos en algunas regiones rurales del país.

Entre junio y noviembre de 2016 tres bebés nacieron sin brazos en un radio de 30 kilómetros de Vitrolles, en el sureste de Francia. Eso siguió a otra serie de casos cerca del área de Ain (centro este), donde ocho bebés nacieron con ese defecto dentro de un radio de 17 kilómetros. Casos similares se han registrado también en otras regiones de la Francia rural.

Una investigación a escala nacional sobre el fenómeno comenzó en octubre pasado y el Gobierno había prometido una actualización antes del 31 de enero, pero esa fecha se retrasó repentinamente, una decisión inexplicable que hace que los padres de los niños afectados se muestren sospechosos. En una carta abierta a los funcionarios de salud pública, los progenitores expresaron sus dudas sobre la investigación en curso y argumentaron que sus preguntas "nunca tuvieron respuestas claras".

¿Pesticidas o casualidad?: Nacimiento de niños sin brazos es un misterio sin resolver en Francia

Remera, un organismo de salud que analiza casos de malformación, llevó a cabo en 2018 su propia investigación, para la que entrevistó a las madres con un "cuestionario muy extenso" sobre sus estilos de vida para ver si existían similitudes entre sus embarazos. Los resultados de las encuestas llevaron a los médicos a descartar la genética y el consumo de drogas y el alcohol como posibles causas de los defectos.

Emmanuelle Amar, directora de Remera en el sureste de Francia, concluyó que "lo único que tienen en común es que todos viven en una zona muy rural". Por lo tanto, el organismo descartó como "más que infinitesimal" la posibilidad de que las malformaciones se debieran a la casualidad, como había sugerido anteriormente la agencia gubernamental.

La causa más probable

Remera cree que los pesticidas perjudiciales que se usan ampliamente en las áreas rurales de Francia son los culpables más probables. El misterio sigue sin resolverse, pero el posible vínculo con la agricultura se basa en el hecho de que casi al mismo tiempo que se observaron los casos en Ain, varias terneras y pollos de la zona también nacieron  sin extremidades.

Amar dijo a RT que las autoridades no quisieron escuchar las preocupaciones de Remera. Por su parte, la exministra de Medio Ambiente de Francia Corinne Lepage dijo a RT que probablemente "existe el temor de descubrir que las causas podrían poner en peligro varios intereses económicos".