Dos de las entidades judías más importantes en Argentina tensaron sus relaciones este viernes, luego de que las autoridades de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) respondieron negativamente a un pedido de la Asociación Mutual Israelí Argentina (AMIA) para que desistan de la querella en la causa por supuesto "encubrimiento" del atentado a su sede, en la que se acusa a la ex presidenta Cristina Kirchner.
Un día después de que trascendiera una carta que la mutual judía envió a la DAIA, brazo político de la comunidad, para reclamarle que dejara la causa, esta última salió a aclarar que no lo hará.
"La DAIA, representación política de la comunidad judía argentina, informa que ha recibido una carta de la AMIA instándola a desistir de impulsar la causa judicial contra la ex Presidenta de la República, a propósito del memorándum suscripto entre nuestro país y la República Islámica de Irán", señalan en un comunicado.
La DAIA se refiere al Memorándum de entendimiento con Irán, firmado en 2013 por el entonces gobierno de Cristina Kirchner para avanzar en un juicio contra los exfuncionarios de gobierno de ese país, acusados por el atentado a la AMIA, ocurrido en 1994, y en el que murieron 85 personas. Si bien el pacto nunca entró en vigencia, le valió a la presidenta una denuncia por "encubrimiento".
El texto sostiene que la entidad "no tiene la intención de desistir de la mencionada querella, pero que someterá el caso a consideración de todas sus instituciones adheridas y filiales del país".
Y agregaron: "La DAIA desconoce los motivos por los cuales la AMIA, una de sus más de 120 entidades adheridas, le ha dado estado público a la cuestión". El documento lleva la firma de su presidente, Jorge Knoblovits, y el vicepresidente segundo, Marcelo Taussik.
La carta que la AMIA hizo pública ayer, firmada por sus directivos, solicitaba a la DAIA desistir de la querella contra Cristina Kirchner, para "reparar un grave error de la gestión anterior" y "empezar a tomar distancia de una causa que está en el centro de la famosa grieta que divide a la mayoría de los argentinos".