El futuro del narcotraficante más afamado del mundo, Joaquín 'el Chapo' Guzmán, se definirá esta semana una vez que el jurado encargado de revisar el juicio celebrado en una corte federal de Nueva York, EE.UU., emita su fallo.
Un asunto que, luego de tres meses, arrojó una oleada de elementos probatorios, testigos y revelaciones que podrían poner un final definitivo a la carrera delictiva de quien es señalado por la Fiscalía de EE.UU. como líder del Cártel de Sinaloa, famoso por haber protagonizado dos fugas de cárceles de alta seguridad en México.
Las principales acusaciones que enfrenta el capo mexicano son por haber introducido al menos 150 kilogramos de cocaína a EE.UU., además de recibir ganancias por más de 10.000 millones de dólares del narcotráfico en un periodo de 12 meses.
De ser encontrado culpable, el 'Chapo' Guzmán sería condenado a cadena perpetua.
Los cargos
Aunque la Fiscalía de EE.UU. acusó a Guzmán de 17 cargos en el inicio del juicio oral, ahora sólo quedan 10:
- Participación continua en una empresa criminal.
- Conspiración internacional para producir y distribuir cocaína, heroína, metanfetaminas y marihuana.
- Conspiración para importar cocaína.
- Conspiración para distribuir cocaína.
- Distribución de cocaína a nivel internacional (por este delito tiene 4 cargos)
- Uso de armas de fuego.
- Conspiración para lavado de dinero provenientes de las ganancias del narcotráfico.
Las llamadas
A lo largo del juicio, los fiscales presentaron una serie de pruebas acusatorias en contra Guzmán, entre las cuales destacan 200 conversaciones telefónicas del capo con socios, sicarios y autoridades mexicanas.
Fue así que, a través de las llamadas interceptadas por autoridades estadounidenses, el jurado escuchó al 'Chapo' Guzmán negociando en 2010 el envío de seis toneladas de cocaína con un integrante de la guerrilla colombiana de las FARC.
Entre las conversaciones, también figura un diálogo con la Fiera, exsocia del narcotraficante mexicano, mientras discutían la creación de dos compañías en Alemania y Ecuador para exportar droga a "Europa, Canadá, Australia y también a EE.UU.", así como la adquisición de 700 kilogramos de cocaína en Belice.
Otra de las llamadas evidenció a Pedro Flores, un traficante asentado en Chicago, negociando con Guzmán el precio de 20 kilogramos de heroína. Flores reconoció ante las autoridades estadounidenses que recibió 38 kilos de cocaína del Cártel de Sinaloa entre 2005 y 2008, con un valor de 800 millones de dólares.
Testimonios incriminatorios
Entre los testigos que colaboraron con el Gobierno de EE.UU. para relatar su relación criminal con Guzmán, figura el de Jesús 'el Rey' Zambada, quien fungía como contador y líder del Cártel de Sinaloa en Ciudad de México.
Zambada contó al jurado la manera en que el 'Chapo' compraba cocaína colombiana a 3.000 dólares el kilogramo para luego venderla en Nueva York a un precio de 35.000 dólares el kilo. También indicó que el narco mexicano era responsable de traficar entre 80 y 100 toneladas anuales de cocaína a EE.UU.
Otro de los testimonios más contundentes fue el de Miguel Ángel 'Gordo' Martínez, expiloto de Guzmán. El operador relató ante el jurado la manera en que el 'Chapo' recibía hasta tres aviones al mes con montos de hasta 10 millones de dólares como resultado de la venta de drogas en EE.UU.
Martínez también explicó cómo el Cártel de Sinaloa se asociaba con colombianos para cargar 14 toneladas de cocaína en barcos atuneros que se encontraban en aguas internacionales para traficar cocaína. En este sentido, reveló que entre 1990 y 1993 el Cártel de Sinaloa compró entre 25 y 30 toneladas de cocaína por año a cárteles colombianos.
Juan Carlos 'Chupeta' Ramírez, exlíder del cártel del Norte del Valle de Colombia, también contó la manera en que exportó más de 400 toneladas de cocaína a EE.UU. entre 1989 hasta 2007, a través de avionetas, con ayuda del 'Chapo' Guzmán.
Historias macabras
El juicio también arrojó relatos sorprendentes sobre la violencia con la que operaba el narcotraficante mexicano. Y aunque no está acusado explícitamente de delitos como asesinato o abuso sexual de menores, dichos casos podrían ser determinantes para el veredicto emitido por el jurado que procesa el caso.
Un sicario de nombre Isaías Valdez Ríos, alias 'Memín', aseguró que el 'Chapo' torturó y ejecutó a tres narcotraficantes rivales. Uno de ellos fue enterrado vivo después de que Guzmán le disparó. Los otros dos fueron golpeados con palos antes de ser ejecutados y lanzados a una hoguera.
Sin embargo, el testimonio que más impacto causó fue el que se produjo en la recta final del juicio. Documentos presentados por la fiscalía, donde se recopila la versión de un testigo, identificado como el narcotracante colombiano Alex Cifuentes, relató la vez que Guzmán ordenó drogar a niñas de 13 años de edad para luego tener relaciones sexuales con ellas.
Manuel Hernández Borbolla
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