Una investigación dirigida por la ONU concluye que el periodista saudita Jamal Khashoggi fue "víctima de un brutal asesinato perpetrado por funcionarios sauditas".
Según las Naciones Unidas, el país árabe "socavó gravemente" los esfuerzos de Turquía para investigar el asesinato de Khashoggi, que tuvo lugar el pasado 2 de octubre en el consulado de Arabia Saudita en Estambul.
La relatora especial sobre ejecuciones extrajudiciales de la ONU, Agnès Callamard, declaró que su equipo ha revisado "el escalofriante y espantoso material de audio" del homicidio, que habrían obtenido a través de la Inteligencia turca. Asimismo, añadió que ha solicitado una visita oficial a Riad para abordar la cuestión.
El pasado 3 de enero la Fiscalía de Arabia Saudita solicitó la pena de muerte para cinco de los 11 sospechosos detenidos por el asesinato de Khashoggi, proceso judicial que la ONU dijo que no cumplía con los requisitos de una investigación independiente e imparcial. Por su parte, el presidente de Turquía, Recep Tayyp Erdogan, calificó el pasado domingo de "horrible" este asesinato y declaró que no entiende que EE.UU. no reaccione ante este crimen.