La gobernadora de Nuevo México (Estados Unidos), Michelle Lujan Grisham, ha ordenado a la Guardia Nacional de su territorio que retire a la mayoría de sus integrantes de la frontera con México porque no desea participar en "la farsa del alarmismo" que habría creado el presidente de su país, Donald Trump, informa NBC News.
Esta mandataria considera que el presidente de EE.UU. ha hecho "un mal uso" de las "diligentes tropas" de esa fuerza de reserva y rechaza "la opinión federal de que existe una incontenible crisis de seguridad nacional" a lo largo de la frontera sur.
En cualquier caso, Lujan Grisham ordenó a los contingentes del condado de Hidalgo y otras zonas próximas del suroeste que permanecieran en su sitio para continuar su ayuda a "las necesidades humanitarias" de esas comunidades, que han visto cómo "grandes grupos de familias, mujeres y niños" cruzaban la frontera "en los últimos meses".
Despliegue de 3.750 soldados en la frontera con México
La semana pasada, Pentágono decidió desplegar 3.750 miembros de las Fuerzas Armadas de EE.UU. en la frontera con México. De esta manera, el número total de militares en servicio activo que durante tres meses patrullarán para apoyar a los agentes fronterizos rondará los 4.350 soldados.
Además, el pasado 6 de febrero el Departamento de Defensa de EE.UU. autorizó el traslado de 250 militares en servicio activo a la ciudad fronteriza de Eagle Pass (Texas) ante la próxima llegada de una nueva caravana de inmigrantes centroamericanos.
Washington trasladó estas tropas desde Arizona con el objetivo que planteó el inquilino de la Casa Blanca: construir un "muro humano" que detenga la entrada de migrantes a EE.UU.