Elliott Abrams, enviado especial de EE.UU. para Venezuela, rechazó cualquier iniciativa de diálogo con el Gobierno de Nicolás Maduro como vía para solucionar la crisis política que atraviesa la nación caribeña, tras la autoproclamación del parlamentario Juan Guaidó como "presidente encargado".
"El tiempo para dialogar con Maduro ya pasó", recalcó este jueves Abrams a periodistas, justo después que un Grupo de Contacto Internacional anunciara en Montevideo el envío de una "misión técnica" a Venezuela a favor de un acercamiento entre las partes en conflicto.
Para el enviado de Washington, cualquier conversación entre el Gobierno del presidente Nicolás Maduro y la oposición podría ser "manipulado" por el mandatario constitucional para tomar ventaja. La postura de Abrams difiere del pronunciamiento del canciller de Uruguay, Rodolfo Nim Novoa, quien encabeza con México la iniciativa de diálogo para el país caribeño: "La solución tiene que ser venezolana porque la otra alternativa es el caos, la confrontación y el conflicto armado", sostuvo el diplomático.
Pero mientras Abrams declaraba, en Cúcuta, entre la frontera entre Venezuela y Colombia, se esperaba un envío de "ayuda humanitaria", previamente solicitado por Guaidó para "atender" a la población venezolana. Aunque medios norteamericanos señalaron que un vuelo con productos había salido hacia Venezuela, el secretario de Estado de Puerto Rico, Luis Rivera Marín, confirmó que el cargamento no aterrizó en el país suramericano.
Caracas ha denunciado que la "ayuda humanitaria" es un "espectáculo" que forma parte de plan de EE.UU. para justificar una "intervención extranjera", y avanzar en su intento de deponer al presidente Maduro, electo con más 60% de los votos en mayo de 2018.
En enero pasado, Washington anunció el envío de ayuda humanitaria por un monto de más de 20 millones de dólares, lo que constituye la milésima parte de la cantidad que Venezuela perdió el año pasado, producto de las medidas unilaterales y coercitivas aplicadas por EE.UU.
Anular sanciones sería una verdadera ayuda
El Gobierno de Maduro ha reiterado que la mejor ayuda que puede ofrecer la Administración de Donald Trump es levantar las medidas coercitivas unilaterales que impiden a Venezuela acceder a créditos internacionales, mover sus activos financieros, y comprar medicinas y alimentos para la población.
De hecho, los 20 millones de dólares ofrecidos por el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, son la misma cantidad que Venezuela perdió, desde julio de 2017 hasta julio de 2018, solo en comisiones de operaciones cambiarias para la compra de medicamentos.
Pese a la insistente solicitud hecha por Caracas de anular las sanciones, EE.UU. mantiene firme su política de asedio financiero contra Venezuela. Este jueves sumó una nueva medida.
En la misma conferencia de prensa donde descartó cualquier posibilidad de diálogo, Abrams informó sobre nuevas sanciones a los diputados de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) de esa nación caribeña, mediante las cuales se establecen restricciones en el uso del visado.