El presidente iraní, Hasán Rohaní, ha asegurado este lunes en su discurso con motivo del 40.º aniversario de la victoria de la Revolución Islámica que el país continuará avanzando para mejorar su poder militar y defensivo. Citado por IRNA, Rohaní ha indicado que en el día de hoy "el 85% del equipo militar necesario para la defensa del país se fabrica en Irán".
"No hemos pedido ni pediremos permiso para hacer misiles. Continuaremos nuestro camino militar y defensivo", ha mantenido Rohaní al remarcar que el poder militar de Irán, especialmente en los últimos cinco años, ha "asombrado" al mundo.
"Eso significa que el enemigo nunca alcanzará sus objetivos. El mundo debe saber que la República Islámica de Irán es más fuerte de lo que era en los primeros años posteriores a la Revolución Islámica", ha manifestado el presidente.
Rohaní ha agregado que Irán está librando una guerra psicológica con el enemigo y necesita mantenerse unido para ganarla. "Irán no permitirá que Estados Unidos gane esta guerra. Estados Unidos ha anunciado repetidamente en los últimos años que Irán caerá, pero sin éxito. Irán ha alcanzado una posición superior. Gracias a su resistencia y unidad, Irán superará los problemas y las barreras", ha señalado el presidente. Ha remarcado que las aspiraciones de la nación iraní no han cambiado y son las mismas que las de la Revolución Islámica de hace 40 años.
También este lunes, Teherán ha rechazado los llamamientos de Washington para que retire sus fuerzas de los países de Oriente Medio. Las autoridades iraníes han respondido diciendo que es el "enemigo" el que debería volverse a casa.
"El enemigo no puede pedirnos que salgamos de la región. Son ellos quienes deben abandonarla", ha subrayado el segundo al mando de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), Hossein Salami, según Press TV. El líder militar ha agregado: "Ayudaremos a cualquier musulmán en cualquier parte del mundo".
La presencia de Irán en Siria ha venido molestando a Estados Unidos cada vez más desde que el presidente Trump anunciara la retirada de 2.000 tropas de un país donde Washington ha tenido presencia desde 2015. Sin embargo, en una entrevista reciente el presidente Trump afirmó querer mantener algunas fuerzas en la región "para proteger a Israel" y "vigilar a Irán".
Esta jornada en Irán culminan los actos oficiales celebrados bajo el nombre de 'El amanecer de 10 días', en recuerdo del período entre el 1 de febrero y el 11 de febrero de 1979, cuando el líder de la revolución, el ayatolá Ruhollah Jomeini, regresó del exilio y derrocó a Mohammad Reza Pahleví, el sah de Irán, que gozaba del respaldo de Estados Unidos.