La Defensoría Pública de Río de Janeiro tiene indicios de que miembros de la Policía Militar fusilaron a 13 personas durante un operativo realizado el pasado viernes 8 de febrero.
El auditor general de la Defensoría de Río de Janeiro, Pedro Daniel Strozenberg, dijo en entrevista con UOL que tienen indicios de que se trató de fusilamiento, y no de muertos en enfrentamiento, tal como declaró la Policía Militar.
"Hay quien dice, sobre todo, entre los policías militares, que la operación fue un éxito por haber sido muertos bandidos. Sin embargo, hay fuertes indicios de fusilamiento", señaló Strozenberg.
Operativo contra el narcotráfico
El 8 de febrero, durante un operativo contra el narcotráfico en el barrio de Santa Teresa, ubicado en el centro de Río de Janeiro, se suscitó un enfrentamiento entre presuntos delincuentes y autoridades que dejó un saldo de 13 narcotraficantes fallecidos, de acuerdo con la versión oficial.
Pero hay versiones que apuntan a ejecuciones extrajudiciales. La agencia AP reportó que en el lugar de la escena se escucharon tiros y momentos después dos oficiales fuertemente armados fueron vistos en una camioneta junto con dos cuerpos envueltos en una sábana con sangre.
Medios locales también reportaron que en 8 de los 13 cuerpos, los fallecidos tenían impactos de bala en la cabeza y en la espalda.
Strozenberg declaró que la Defensoría de Río de Janeiro busca acceder a las necropsias para saber si se trató de un fusilamiento o de un enfrentamiento.
"Así podemos conocer con certeza el número de tiros que alcanzaron cada uno de los muertos y la trayectoria de las balas", dijo.
Amnistía pide esclarecer el caso
La organización Amnistía Internacional exigió una investigación detallada, imparcial e independiente para determinar la causa de cada una de las muertes.
"El estado de Río de Janeiro tiene un historial de altos números de homicidios derivados de la intervención policial y los números aumentan cada año", denunció Amnistía Internacional en su cuenta de Twitter.
En 2018, se registraron 1.532 casos de personas muertas por la policía en servicio, de acuerdo con el recuento de la organización.
Brasil "en guerra"
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha defendido la posesión de armas con el argumento de que su país está "en guerra".
Con tan solo dos semanas en la presidencia, Bolsonaro firmó un decreto que facilita la adquisición de armas de fuego con la intención de armar a las "buenas personas" para que hagan frente a la delincuencia y a las pandillas.
Con este decreto, los brasileños tendrán derecho a comprar hasta cuatro armas de fuego, límite que podrá aumentarse en casos específicos. Además, el mandatario amplió el plazo de duración de las licencias de armas de cinco a diez años.
Críticas al decreto
La propuesta de armas de Bolsonaro provocó numerosas críticas de organizaciones de la sociedad civil como el Foro Brasileño de Seguridad Pública, que que considera que "se trata de una apuesta a la violencia".
"Existen evidencias bastantes robustas dentro del debate sobre seguridad pública que, cuantas más armas, más crímenes", publicó la organización en un comunicado.
En 2017, 63.880 personas fueron asesinadas en Brasil, de acuerdo con un recuento del Foro Brasileño de Seguridad Pública. La tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes se ubicó en 30,8, lo que representó un crecimiento del 2,8%.