La primera misión tripulada a Marte necesita un bromista entre los astronautas

Un antropólogo asegura que el grupo requeriría una persona que cumpla el papel de "payaso" para mantener la cohesión interna.

El antropólogo de la Universidad de Florida Jeffrey Johnson asegura que el primer viaje a Marte debe contar con un bromista entre los miembros de la tripulación para aliviar la tensión ante situaciones críticas. El anuncio lo realizó este fin de semana en una conferencia enmarcada en la reunión anual de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia.

"Los grupos funcionan mejor cuando alguien asume el papel de payaso de la clase", señaló Johnson. "Estas personas son las que tienen la capacidad de unir a todos, cerrar brechas cuando aparecen las tensiones y aumentar la moral", agregó.

Hasta ahora se ha oído hablar muchos de los desafíos técnicos del viaje a Marte pero la colaboración humana juega un rol esencial ante el aislamiento extendido al que se someterán los astronautas.  

"Cuando estás viviendo con otros en un espacio confinado durante un largo período de tiempo, como en una misión a Marte, es probable que las tensiones aparezcan. Es vital que tengas a alguien que pueda ayudar a que todos se lleven bien, para que puedan hacer su trabajo, llegar y regresar con seguridad".

Su postulado se presentó en base a estudios previos que reflejan circunstancias similares a las que se avecinan. Así, por ejemplo, trabajó durante cuatro años con equipos de hibernación en la Antártida y determinó la importancia de los bromistas, líderes, amigos, narradores de historias y consejeros que promueven la estabilidad del grupo.

El antropólogo encontró condiciones similares en las bases de Estados Unidos, Rusia, Polonia, China e India y comparó las circunstancias extremas con situaciones más habituales. "Todos podemos pensar en la persona de la oficina que cumple este rol, que nos hace reír y hace que el trabajo sea más agradable", añadió.

Johnson compartió los resultados de investigaciones realizadas junto a la NASA para analizar los roles sociales informales en la viabilidad del equipo y el manejo de conflictos en ambientes extremos, todo ello con miras a la preparación de los tripulantes que viajarán al planeta rojo en el futuro.

En promedio, solo el viaje de ida durará 8 meses y el retardo en las comunicaciones con la Tierra será de hasta 20 minutos. Es decir, ante una emergencia no habrá tiempo para llamar a los agentes de control y el manejo de la situación dependerá únicamente de la tripulación.