Japón continuará el traslado de una base militar de EE.UU. en Okinawa en contra de su pueblo

El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, ha declarado que el traslado de la base militar estadounidense Futenma a otro lugar de Okinawa "no puede posponerse más", a pesar de que el pasado 24 de febrero rechazaron la idea más del 70 % de los habitantes de esa isla, que votaron en un referéndum no vinculante en el que participaron el 52 % de los convocados.

Recuento parcial en Okinawa: El 72% de los residentes rechaza la reubicación de una base estadounidense

Al respecto, el Ministro de Defensa japonés, Takeshi Iwaya, también ha expresado que su Gobierno desea "avanzar el trabajo de construcción" de esa nueva instalación militar mientras explica la necesidad de su reubicación "de una manera cortés y cordial" para obtener "la comprensión" del pueblo de Okinawa.

Esa instalación provoca controversia desde hace años. Está ubicada en el centro de Ginowan, una ciudad densamente poblada en donde asocian diversos crímenes al personal militar de Estados Unidos, protestan por el ruido que generan los aviones que aterrizan y despegan y temen el riesgo de accidentes que genera tanto tráfico aéreo.

En la consulta popular, las autoridades japonesas preguntaron a los residentes si deseaban reubicar la base en Henoko, una localidad costera ubicada a unos 30 kilómetros. El asunto principal es que la mayoría no quiere que haya ningún complejo militar de EE.UU. en Okinawa. Además, el nuevo lugar también amenazaría al ecosistema marino de la zona.

Denny Tamaki fue elegido como gobernador de la prefectura de Okinawa en septiembre de 2018 porque abogaba por que Tokio sacara cualquier base militar de EE.UU. fuera de la isla. Tras la "realmente significativa" consulta popular, ha asegurado que "demandará" que el Ejecutivo de Abe revise sus políticas y pare la nueva construcción "de inmediato".