El ministro venezolano de Exteriores, Jorge Arreaza, ha asegurado este lunes, durante una entrevista con el noticiero estadounidense Democracy Now, que su Gobierno no tolerará injerencias extranjeras. "No vamos a permitir una intervención, somos los venezolanos quienes resolveremos nuestros problemas", indicó a su interlocutor.
Arreaza ha afirmado también que la actual crisis en Venezuela y el interés de EE.UU. se debe al petróleo, y asegura que en Washington "quieren desbancar a Maduro porque pretenden recuperar el control que tenían sobre la economía venezolana antes de la revolución bolivariana". A este respecto, acusó al asesor de Seguridad Nacional estadounidense, John Bolton, de "actuar como un gángster".
Asimismo, el canciller atribuyó la situación política actual en Venezuela a la existencia de un "plan" que "empezó el año pasado, cuando decidieron no aceptar los resultados de las elecciones presidenciales".
Durante la entrevista, Arreaza también desmintió las acusaciones que se han vertido sobre su Gobierno en relación a un supuesto ataque del Ejército local contra la propia ciudadanía venezolana: "Cuando ves la televisión, parece que Maduro dio la orden a sus militares de disparar contra la gente, y eso no es cierto", aseguró el ministro. "Fuimos muy, muy prudentes y resistimos una invasión", aclaró.
Su visita a la Organización de las Naciones Unidas
El pasado viernes 22 de Febrero, Arreaza visitó la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York (EE.UU.), donde, según explicó el propio ministro, se creó un grupo para proteger los principios que integran la Carta de esa misma organización y se condenó la intervención en Venezuela.
"En mi visita a las Naciones Unidas sostuve una reunión con 60 representantes de diferentes países que expresaron su apoyo y respaldo a la defensa de los principios y derechos de nuestro pueblo", indicó Arreaza.
Durante su comparecencia en la ONU, Arreaza también desmintió que el Ejército venezolano hubiera emprendido acciones contra el pueblo. "Los informes de usos de armas ligeras en la frontera venezolana no son correctos, un militar nunca tendrá órdenes de disparar a civiles", aseguró entonces.