Una investigación que sigue los pasos del narcotráfico en San Diego, California (EE.UU.), dio a conocer este viernes que un veterano de la Infantería de Marina de EE.UU. llegó a ser presunto capo de la cocaína utilizando su entrenamiento militar, forjando alianzas y entregando sobornos, informó Los Angeles Times.
Ángel Domínguez Ramírez, de nacionalidad estadounidense y mexicana, fue acusado por la Fiscalía de San Diego de ser el pilar de una red, que movilizaba sustancias narcóticas obtenidas desde varios países latinoamericanos como Perú o Ecuador, y las ingresaba a California y Texas, puntos de distribución hacia diferentes zonas del territorio estadounidense.
En el expediente de las autoridades se informa que el veterano forjó alianzas con algunos de los grupos criminales más peligrosos de México, como el cartel de los Beltrán Leyva, el cartel de Jalisco Nueva Generación, el cartel de Sinaloa, el cartel del Golfo y Los Zetas. Y que había utilizado su entrenamiento castrense desde que se unió a los temidos Zetas.
Los fiscales revelaron que el cartel de Domínguez tenía "un nivel de corrupción sin precedentes dentro del Gobierno mexicano, los departamentos de policía locales, las agencias policiales federales y el Ejército".
En el proceso se han presentado cargos contra más de 41 personas, incautado 5.000 kilogramos de cocaína e ingresos por narcóticos superiores a 9 millones de dólares. Varios medios estadounidenses ya compararon al veterano con Joaquín 'El Chapo' Guzmán, aunque se precisa que el tamaño de las operaciones era mucho menor.