El fallido plan de ingresar a la fuerza a Venezuela un lote de "ayuda humanitaria", el pasado 23 de febrero, también contemplaba la incursión de un grupo armado por el puente Simón Bolívar, fronterizo con Colombia.
El dirigente chavista y designado "Protector del Táchira", Freddy Bernal, explicó que la estrategia era "romper" la "línea de defensa" en el puente Simón Bolívar, mediante el despliegue de grupo violentos de encapuchados.
Si lograban traspasar, refirió Bernal, le tocaba el turno a "cuatro cuadras de grupos armados, que llegaron a estar a 10 metros de la punta [del puente]. Eso era el Caballo de Troya para invadir a Venezuela", sostuvo el político, entrevistado en el programa televisivo moderado por el periodista José Vicente Rangel.
¿Por qué Venezuela cerró la frontera?
Debajo del inactivo puente colombo-venezolano Tienditas, Bernal señaló que el 21 de febrero vio a oficiales norteamericanos y a una "escuadra de reconocimiento del Ejército de Colombia".
Y agregó: "hay testigos de ese hecho, no me lo contaron. A la vez, un helicóptero de la Policía Nacional [de Colombia] patrullaba y un dron estaba sobre nosotros".
El dirigente chavista detalló, además, que recibió el 22 de febrero un aviso del lado colombiano de que habría una incursión a la 1:00 de la mañana por los puentes Simón Bolívar y Tienditas, por lo que "el presidente Nicolás Maduro tomó la decisión de cerrar la frontera", recogió AVN.
La declaración de Bernal coincide con un reporte de Bloomberg, que indica que unas 200 personas, dirigidas por general retirado venezolano Clíver Alcalá Cordones, planeaban "despejar el camino" para el ingreso de los camiones. Sin embargo, asegura la agencia, el Gobierno colombiano "detuvo el plan".
Alcalá Cordones había declarado, en un video divulgado en Twitter en horas de la mañana del pasado 23 de febrero, que iba a liberar "por completo" el espacio geográfico que "discurre hacia Venezuela para ingresar la ayuda humanitaria".
Después del fallido intento de ingresar la "ayuda humanitaria", Bernal acusó a Alcalá de entrenar en Colombia a desertores militares venezolanos y de preparar planes para atacar "centros militares, policiales, estaciones de gasolina, comida y ejecutar asesinatos selectivos en Venezuela".
Hasta ahora, la frontera entre ambos países se mantiene cerrada en medio de un clima marcado por el anuncio de Caracas de romper "todas las relaciones diplomáticas y políticas" con Bogotá.