Para sorprender a todos con su primer iPhone, Apple desarrolló ese dispositivo de manera tan secreta durante más de dos años que muchos de los ingenieros que trabajaban en el proyecto ni siquiera conocían su diseño final ni su nombre, así que lo denominaban 'M68' o 'Purple 2'.
Así, los empleados de esa tecnológica estadounidense trabajaban con placas de prueba que contenían casi todos los componentes del iPhone original y el portal The Verge ha obtenido imágenes del prototipo que utilizaban entre 2006 y 2007, unas instantáneas que se conocen por primera vez.
Ese tablero de circuitos rojo, que a veces ni siquiera estaba conectado a una pantalla, estaba principalmente diseñado para probar el 'software'.
Tenía similitudes con la placa base de una computadora de esa época, ya que incluía puertos LAN para acceder a la red y un conector USB.
En cambio, en otros aspectos era completamente diferente, debido a que disponía de conector para tarjeta SIM, dos antenas para Wi-Fi y Bluetooth y un módulo de radio.
En la placa había un procesador de la firma surcoreana Samsung, así como chips fabricados por las empresas Intel, Infineon, CSR, Marvell y Skyworks con las que Apple se asoció para fabricar este primer iPhone.
La compañía de Cupertino (California, Estados Unidos) empleó estos prototipos hasta la presentación de ese teléfono inteligente en 2007 y, desde entonces, utilizó placas más compactas.