El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Reserva Federal de EE.UU. decidió mantener las tasas de interés de los fondos federales en un rango del 2,25 % al 2,50 %, afirma un comunicado publicado este miércoles en su página web.
La preservación de esas tasas está relacionada con la desaceleración de la economía, tanto la interna de EE.UU. como la mundial, al tiempo que el objetivo inmediato del citado comité es fomentar el empleo y la estabilidad de los precios.
Tras la reunión del FOMC en enero, la información recabada indica que el mercado laboral sigue estando fuerte, pero el crecimiento de la actividad económica se ha desacelerado en comparación con el nivel del cuarto trimestre.
Asimismo, aunque los indicadores muestran que los índices de desempleo siguen siendo bajos, el gasto familiar y la inversión empresarial fija crecen a un ritmo más lento en el primer trimestre de este año.
El FOMC subrayó que la inflación general –considerada sobre una base anual– ha disminuido, en gran parte como consecuencia de la caída de los precios energéticos. La inflación en artículos distintos de los alimentos y en la energía se mantiene cerca del 2 %.
El resultado que se espera alcanzar a partir de esta iniciativa sería el de un aumento de la actividad económica, un fuerte mercado laboral y una inflación cercana a la meta trazada por el FOMC, del 2 %. La Reserva Federal espera que la economía estadounidense crezca en 2,1 % este año.
Algunos expertos piensan que el pronóstico es demasiado optimista.
"Estimamos que el crecimiento económico se mantendrá muy por debajo de la tendencia durante el 2019, razón por la cual creemos que el próximo paso de la Fed (Reserva Federal) será recortar las tasas de interés", cita CBC News a Michael Pearce, economista principal de Capital Economics.
Con la decisión ahora adoptada, el FOMC deja atrás su política de subir constantemente dichas tasas, criterio que mantuvo por tres años. En el 2018 hubo tres aumentos, cada uno de 0,25 %, y en diciembre pasado se estimaba que tendrían dos incrementos en 2019.
Los mercados reaccionaron negativamente a este giro en las políticas de la Fed.