El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, recibirá este miércoles un reporte sobre el cumplimiento del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, del protocolo de convivencia que estableció Quito para la permanencia del periodista australiano en la Embajada en Londres, según comunicó el vicepresidente del país andino, Otto Sonnenholzner.
"Nosotros revisamos el cumplimiento del protocolo. Si lo ha hecho, enhorabuena, si no lo ha hecho tendrá que atenerse a las consecuencias", dijo Sonnenholzner, en conversación con Radio Sonorama.
WikiLeaks tomó en cuenta la información y en un par de tuits se refirió a las reglas impuestas por Quito. Señaló que el protocolo "pone en régimen de aislamiento 60 horas a la semana" al australiano.
Cita al excónsul de Ecuador en el Reino Unido, Fidel Narváez, quien dice que el establecimiento de normas "es una serie de trampas para tener excusas para entregar a Assange a los EE.UU.".
El portal recuerda que el diario estadounidense The New York Times, publicó en diciembre pasado que Moreno "intentó vender" al australiano a Washington.
El protocolo de convivencia se aplicó a Assange el año pasado, luego que se restringiera su acceso a Internet. Entre otras cosas, el documento incluye la prohibición de "realizar actividades que pudieran ser consideradas como políticas y de interferencia en los asuntos internos de otros Estados, o que puedan causar perjuicio a las buenas relaciones del Ecuador con cualquier otro Estado, sea cual fuere la forma que se emplee para ejecutar dichas actividades".
Acuerdo violado "demasiadas veces"
Pese a que Moreno recibirá el informe este miércoles, ya a principios de abril, el mandatario dijo que Assange ha violado "demasiadas veces" el acuerdo de convivencia para garantizar su permanencia en la Embajada de Ecuador en Londres.
Recordó que "Assange no puede mentir o 'hackear', no puede intervenir en política de países porque está en territorio ecuatoriano".
Entretanto, el canciller ecuatoriano, José Valencia, manifestó que comparecerá este jueves ante la Asamblea Nacional (Congreso) de Ecuador para "informar sobre asilo al Sr. J. Assange". Dijo que reportará "en detalle sobre su situación en la Embajada, incumplimientos de protocolo y apreciaciones jurídicas del Estado ecuatoriano".
La semana pasada, WikiLeaks indicó que la expulsión de Assange de la Embajada será cuestión de "horas o días".
Al respecto, Valencia dijo que los "rumores de la inminente salida de Assange vienen desde meses atrás" y señaló que "el asilo diplomático es una facultad soberana de un Estado, que tiene el derecho de otorgarlo o retirarlo unilateralmente cuando lo considere justificado".
Espionaje
Este martes, WikiLeaks denunció que Assange es víctima de una vasta operación de espionaje dentro de la Embajada de Ecuador, donde se encuentra desde junio del 2012, diseñada para lograr que el activista sea extraditado a EE.UU.
"Cámaras de seguridad fueron usadas para monitorear cada movimiento [de Assange] y cada una de sus reuniones con visitantes", dijo el editor en jefe del portal, Kristinn Hrafnsson, en una rueda de prensa.
Un día antes de esta revelación, Valencia señaló que el Gobierno de su país se reserva el derecho de investigar a Assange.
Estas últimas semanas se ha evidenciado que la permanencia de Assange es una gran molestia para el gobierno de Moreno, quien ha dicho que se trata de "un tema heredado".
De hecho, la semana pasada, Quito denunció a WikiLeaks ante la ONU por la filtración de documentos sobre supuestas actividades corruptas de Moreno y su familia; aunque el portal aclaró que no subió en su sitio tales pruebas, sino que citó a otros medios y portales en Twitter.
Según el excónsul Narváez, el Gobierno ecuatoriano como "pretexto" creíble para acabar con su asilo, está "vendiendo la idea" de que Assange ha 'hackeado' el teléfono del presidente Moreno, a pesar de no tener evidencia al respecto y ante el hecho de que el periodista no tiene acceso a Internet u otras comunicaciones.