Mientras la noche del lunes el mundo observaba atónito el voraz incendio que devastó la catedral de Notre Dame de París, al mismo tiempo las llamas avanzaban sobre una parte de la mezquita de Al-Aqsa en Jerusalén, el tercer lugar más importante para el islam.
El fuego se desató en la sala de guardia ubicada cerca de la sala de oración de Marwani, también conocida como los establos de Salomón. Videos publicados en las redes sociales muestran humo saliendo de la parte superior de ese espacio subterráneo.
Afortunadamente, las llamas fueron rápidamente sofocadas sin causar daños materiales significativos ni víctimas. Según la versión preliminar, el incendio habría sido provocado por unos niños que estaban jugando en la zona.