El FBI arrestó este sábado a Larry Mitchell Hopkins, de 69 años, por sospechas de posesión ilegal de armas de fuego y municiones. Hopkins es miembro del grupo armado United Constitutional Patriots acusado de detener a unos 300 migrantes en el estado de Nuevo México en la frontera sur de EE.UU. Fue arrestado en una comunidad limítrofe con la ayuda de la Policía local.
Jim Benvie, un portavoz de United Constitutional Patriots, llamó a Hopkins su "comandante nacional". El fiscal general de Nuevo México, Héctor Balderas, señaló que es "un delincuente peligroso que no debería portar armas estando cerca de niños y familias".