Al menos 704 personas han sido infectadas con sarampión en Estados Unidos en lo que va de año. Se trata del mayor número de casos registrados en un año en el último cuarto de siglo, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades del país norteamericano.
Más de 500 de los infectados no habían sido vacunados, 66 personas han sido hospitalizadas, incluidas 24 con neumonía. Más del 33 % de los infectados son niños de menos de 5 años de edad.
Los mayores brotes y más duraderos se han producido en las comunidades judías ultraortodoxas del condado de Rockland (estado de Nueva York) y en el barrio neoyorquino Brooklyn, que contabilizan 663 casos, el 94 % del total.
Las autoridades de Nueva York han ordenado una campaña de vacunación obligatoria, mientras que el condado Rockland ha instruido que cualquier infectado con esa enfermedad contagiosa y potencialmente peligrosa para la vida evite los lugares públicos o pague una multa de 2.000 dólares.
Asimismo, centenares de estudiantes fueron puestos en cuarentena la semana pasada en dos universidades de Los Ángeles.