Un frasco de brandy de plata que perteneció a uno de los pasajeros de Titanic fue vendido en la casa de subastas británica Henry Aldridge & Son por 76.000 libras esterlinas (más de 98.000 dólares), informa The Irish Times.
El frasco fue entregado por su propietaria, Helen Churchill Candee, a su amigo (y pasajero en primera clase), Edward Kent, justo antes de que el barco empezara a hundirse. La mujer pensaba que él tenía más posibilidades de sobrevivir que ella.
Sin embargo, fue Candee la que sobrevivió a la tragedia; Kent murió. Cuando su cuerpo fue recuperado por la tripulación del barco CS Mackay-Bennett, esta halló también con él el frasco deformado, el cual posteriormente se le envió a su esposa. El objeto acabaría siendo devuelto a la familia de Candee.