La justicia uruguaya ha sentenciado a Gabriel Fernández, delantero del Club Atlético Peñarol, a 60 días de arresto domiciliario nocturno, sin que afecte su trabajo, por haber atropellado el 29 de diciembre de 2018 a Romina Fernández, de 18 años, quien sufrió múltiples fracturas y se encuentra en coma, reseñan medios locales. El futbolista tendrá que permanecer en su domicilio entre las 22:00 y las 6:00 horas.
Además, el jugador deberá pedir autorización para salir del país durante el mismo plazo de tiempo. Fernández fue fichado por el club español Celta y tenía previsto incorporarse al equipo en julio. Por lo tanto, ante el riesgo de una huida el tribunal exigió que el futbolista entregara su pasaporte.