Este domingo el aeropuerto internacional Sheremétievo de Moscú ha sido escenario de un fatídico aterrizaje de emergencia de un avión Sukhói Superjet 100 de la aerolínea rusa Aeroflot, cuyos motores se incendiaron tras el contacto con la tierra, dejando en llamas toda la parte trasera de la aeronave.
El avión con 73 pasajeros y 5 miembros de la tripulación a bordo cubría la ruta entre Moscú y la ciudad rusa de Múrmansk, pero decidió volver al aeropuerto de partida por problemas de carácter técnico y aterrizó alrededor de media hora después del despegue.
Los pasajeros fueron evacuados más rápido de lo que establecen las normas, en 55 segundos en vez de 90, pero no se logró evitar víctimas mortales. Inicialmente se informó sobre 13 fallecidos, pero más tarde el Comité de Investigación de Rusia confirmó que de las 78 personas que se encontraban a bordo sobrevivieron solo 37, con lo cual de momento el número de muertos se estima en 41.
Entre los sobrevivientes hay 33 pasajeros y 4 tripulantes. Desde Aeroflot aseguraron que la tripulación hizo todo lo posible para salvar a los pasajeros y detallaron que el capitán fue el último en abandonar el avión en llamas. La aerolínea también ha prometido transportar gratis a Moscú a los familiares de los pasajeros afectados.
En la Red pronto aparecieron videos del avión incendiado en los que se observa el fuego y una densa columna de humo negro, así como el despliegue de los equipos de emergencia en la pista.
Otro video evidencia cómo el SSJ-100 primero toca tierra, luego se eleva y vuelve a tocar la pista, después de lo cual se produce el incendio.
También circula una escalofriante grabación filmada por uno de los pasajeros desde el interior del avión que muestra una de las alas en llamas mientras en el fondo se escuchan los gritos desesperados de la gente.