El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha firmado este martes un decreto que flexibiliza el porte de armas para cazadores y socios de clubes de tiro, a quienes a partir de ahora se les permitirá dirigirse a los centros de práctica con sus fusiles o pistolas cargadas.
La medida permitirá además el porte de armas para los miembros de las Fuerzas Armadas con más de diez años de servicio. "La seguridad pública comienza dentro de casa", señaló Bolsonaro tras firmar el decreto.
En palabras del mandatario, la nueva norma garantizará "el derecho individual de que cada quien que quiera tener y portar un arma de fuego, lo pueda hacer".
Según reconoció el presidente de brasileño, el gobierno fue "al límite de la ley" al editar el decreto, que también libera la importación de los productos, aumenta límites de munición que pueden adquirir civiles, entre otros cambios.
De acuerdo al ministro de la Casa Civil, Onyx Lorenzoni, la norma abarca "toda la extensión del área particular del inmueble" en que vive el titular del registro de arma, incluso en el caso de propiedad rural.
En esta área, el ciudadano estará "libre para la defensa de su propiedad y de su familia contra cualquier agresión injusta, actual e inminente".