Una científica de Argentina llamada Marina Simian, quien junto a un equipo de colegas trabaja en el desarrollo de nuevas terapias para tratar el cáncer, ganó 500.000 pesos (26.000 dólares) en el programa '¿Quién quiere ser millonario?', de la televisión local, y contó que acudió al concurso con el fin de recaudar fondos para los trabajos que intentan mejorar la salud de las personas.
Aquella bióloga se desempeña en la Universidad Nacional de San Martín y pertenece al Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), que depende del Gobierno de Mauricio Macri.
En los últimos meses, varios especialistas y miembros del organismo denunciaron una política de recortes por parte de la Administración actual, que tuvo como principal consecuencia la reducción de cupos disponibles: 2.145 profesionales de la ciencia no fueron admitidos en el CONICET y tienen que buscar un empleo diferente. Además, detallaron que el achique presupuestario también complica el desarrollo de las investigaciones en ese país sudamericano.
Con ese contexto, se viralizó en las redes sociales el video de Simian donde cuenta que acudió al popular ciclo del canal Telefé para ganar el dinero del premio y otorgárselo a su equipo de especialistas.
Cuando estaba a punto de obtener el monto que les permitirá avanzar en sus investigaciones, no pudo contener la emoción: "Está difícil, y uno le pone mucho", expresó en la noche del martes, intentando retener las lágrimas.
Según su relato, la mayor adversidad está "en el presupuesto de ciencia y tecnología". Sobre ello, describió: "Tengo compromisos con mis becarios y les tengo que proveer lo que ellos necesitan para trabajar". Además, la situación es todavía más compleja por el duro momento económico de Argentina, donde la cotización del dólar se eleva de manera desproporcionada, y Simian necesita insumos que se adquieren en aquella moneda extranjera.
En otras palabras, las herramientas son cada día más caras: "Tuvimos una gran devaluación y para nosotros eso es terrible porque todo está en dólares. Además, tenemos el inconveniente de que comprar los reactivos en Argentina sale tres o cuatro veces más de lo que sale el mismo producto en el exterior", manifestó.
La historia del recorte en ciencia que atravesó las pantallas
Marina no ocultó la responsabilidad del Ejecutivo en el conflicto, y comentó que ganó un subsidio en el 2016 para concretar sus investigaciones, pero el dinero "se da a cuenta gotas, y no en los tiempos pactados". Así, a medida que la científica iba contando el complicado contexto, la audiencia del programa alcanzaba números impensados, hasta convertirse en lo más visto de la noche.
Más tarde, una lluvia de críticas hacia el Ejecutivo inundó Twitter, y en su gran mayoría apuntan hacia el ajuste presupuestario implementado por el presidente de esa nación latinoamericana, que intentará ser reelecto en octubre de este año. De hecho, importantes dirigentes sindicales opinaron sobre la actitud gubernamental.
Al mismo tiempo, referentes de la izquierda local recordaron el acuerdo que Macri firmó con el Fondo Monetario Internacional (FMI), relacionándolo con la caída del financiamiento en ciencia.
A su vez, periodistas ironizaron sobre el nombre del ciclo televisivo y la situación laboral de los científicos argentinos.
Por lo pronto, Simian dijo públicamente que el premio le ayudará a "salvar el año", mientras su país enfrenta un duro momento económico.
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