El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, calificó como una "provocación" la incursión de un buque estadounidense en aguas jurisdiccionales venezolanas, ocurrida la semana pasada.
"Sin lugar a dudas fue una provocación contra Venezuela, para probarnos, para ver qué hacía nuestra Armada, para ver si tenemos miedo, para ver si dudamos en la defensa, y la reacción fue ejemplar", dijo el mandatario suramericano antes de participar en una 'Marcha por la lealtad militar', efectuada desde el Comando de la Infantería de Armada Bolivariana, en el estado Vargas, a 55 kilómetros de la capital venezolana.
El pronunciamiento se produce días después de que la Armada de Venezuela detectara la presencia del USCG James, de la Guardia Costera de EE.UU., cuando navegaba en la zona económica exclusiva de la nación bolivariana. Según militares venezolanos, la nave estadounidense se acercó 14 millas náuticas (unos 26 kilómetros) al puerto de La Guaira, en el estado Vargas.
El dignatario bolivariano celebró los "nervios de acero" y la "preparación moral y psicológica" mostrada por los efectivos militares para "poner orden en el mar venezolano", y lograr que el navío norteamericano saliera del las aguas territoriales del país caribeño.
"Es una victoria del derecho internacional, de la paz y de la moral militar venezolana", valoró Maduro.