El presidente de EE.UU., Donald Trump, afirmó este viernes que puede perdonar a varios exmilitares estadounidenses demandados por crímenes de guerra.
"Contemplamos muchos perdones diferentes, a mucha gente diferente", dijo a un periodista cerca de la Casa Blanca antes de partir a Japón: "Algunos de esos soldados son personas que combatían duro, mucho tiempo".
Se trata de dos o tres exmilitares, precisó el mandatario.
"Usted sabe que los enseñamos a ser grandes luchadores. Y a veces, cuando pelean, supongo que son tratados realmente muy injustamente", afirmó.
Con todo eso, advirtió que hasta el momento no había tomado una decisión definitiva: "Es un poco polémico. Es muy posible que deje que los juicios continúen, y tomaré mi decisión después del juicio".
De este modo, corroboró la información de The New York Times, que publicó hace una semana que la Casa Blanca buscaba indultar a algunos exsoldados con ocasión del Día de los Caídos, que se celebrará en EE.UU. el próximo lunes.
En particular, reportó que la administración de Trump había solicitado el dosier de Edward Gallagher, jefe de operaciones especiales de los equipos SEAL de la Armada, que ha sido acusado de crímenes cometidos en Irak en el 2017. Entre otras cosas, supuestamente apuñaló hasta la muerte a un cautivo indefenso y mató a tiros a dos civiles.
Además, fuentes anónimas contaron al periódico que otros candidatos al perdón podrían ser Nicholas A. Slatten, contratista de Blackwater que mató decenas de iraquíes desarmados en el 2007; Mathew L. Golsteyn, miembro de Fuerzas Especiales del Ejército de EE.UU. y supuesto asesino de un afgano en el 2010; y un grupo de francotiradores del Cuerpo de Marines que fue castigado por profanar cadáveres de talibanes en el 2011.