El Ministerio de Asuntos Exteriores de España expresó que está sorprendido "negativamente" ante la decisión de la Cancillería rusa de convocar al embajador en Moscú, Fernando Valderrama, en relación a las palabras del ministro de Exteriores español, Josep Borrell, quien en una entrevista publicada la semana pasada, calificó a Rusia de una "amenaza" y un "viejo enemigo", recoge La Vanguardia. Moscú considera que las declaraciones del político español son perjudiciales para las relaciones bilaterales entre los dos países.
"Creemos que Rusia ha sobrerreaccionado con esta decisión", indicó un portavoz del Ministerio de Exteriores, confirmando la reunión. "Han interpretado en clave bilateral una serie de reflexiones sobre la geopolítica global hechas desde el prisma europeo", agregó la Cancillería. Además, desde España señalan haber quedado sorprendidos aún más de que el Kremlin haya hecho pública la cita con Fernando Valderrama.