Desde 1992, cada 8 de junio se celebra el Día Mundial de los Océanos. En la última década, lo hace además bajo el auspicio de Naciones Unidas. Uno de sus objetivos es acabar con la contaminación por plásticos; porque, según la ONU, cada año 13 millones de toneladas acaban en el mar.
El mes pasado, un video de la Fundación Mundo Marino mostró cómo una tortuga verde juvenil, llamada Chelonia mydas, defecó una gran cantidad de basura mientras era tratada por especialistas en la provincia de Buenos Aires. El caso de este animal no es único y en realidad dejó expuesto un inconveniente serio de contaminación que afecta a todo el planeta.
El 90% de los desperdicios que flotan en los océanos derivan del plástico. Según datos del 2016, en el planeta se originaron 242 millones de toneladas y es tan solo el 12% de la basura que se genera a lo largo de 12 meses. Pero si nos posicionáramos sobre América, ¿cuál es el panorama general?
Cada habitante de esta región origina un promedio de 1 kilo de basura diario. México, Chile y Argentina figuran entre los países con más desechos mientras en la otra punta de la lista se encuentran Guatemala, Bolivia y Honduras.
Sin embargo, aparece una curiosidad: los países angloparlantes del continente son los más contaminantes. Mientras por ejemplo, los mexicanos producen 1,16 kilogramos al día, un pequeño archipiélago del Caribe cuadriplica los valores: se trata de las Islas Vírgenes Estadounidenses que ostentan 4,46 kilogramos per cápita en una sola jornada.
¿Cómo es posible que en un lugar donde viven unos 100.000 habitantes sea una especie de fábrica de residuos? La enorme afluencia de turistas hace crecer las ganancias por consumo pero al mismo tiempo suben las toneladas de desperdicios.
Futuro sombrío
En la ecología, existe la denominada regla de las tres 'R': reducir, reutilizar, reciclar. Pues bien, en América Latina no se cumple semejante precepto: según este estudio, solo se vuelve a usar el 4,5% de los desechos mientras que el reciclado promedio del planeta es de 13,5%.
La disminución del volumen no parece ser el camino a seguir. Las proyecciones indican que en el 2050 podría haber un aumento de basura de un 70% en todo el mundo debido al crecimiento de la población, la urbanización desmedida y el desarrollo económico de las ciudades.
Son las tres causas principales que buscan explicar porque produciremos más y más residuos hasta llegar en tres décadas a 3.400 millones de toneladas anuales de desechos. El caso de la tortuga marina que comió plástico, con las cifras se transforma en una muestra de lo difícil que será salvar al planeta de esta plaga llamada basura.
Si te ha gustado, ¡compártelo con tus amigos!