El presidente de Argentina, Mauricio Macri, buscará su reelección en octubre de la mano de un peronista y exkirchnerista, el senador Miguel Ángel Pichetto, quien fue anunciado este martes como candidato a vicepresidente de la alianza Cambiemos.
La decisión fue transmitida este martes por el propio Macri a través de sus redes sociales, y se enmarca en la voluntad del oficialismo en ampliar su espacio para confrontar con un peronismo que, detrás de la figura de Alberto Fernández y Cristina Kirchner, viene engrosando un frente electoral bajo la consigna de la unidad.
"Necesitamos construir acuerdos con mucha generosidad y patriotismo", dijo el mandatario argentino en un mensaje que compartió a través de Twitter.
Pichetto habló horas después del mensaje del presidente en una conferencia de prensa en el Senado. Dijo que aceptó la propuesta del presidente "inmediatamente", y valoró las "coincidencias" que tiene con él respecto a sus ideas de generar "un capitalismo inteligente" para la Argentina.
La jugada política del Gobierno es arriesgada. Al elegir a un peronista y exkirchnerista para acompañar la candidatura presidencial de Macri, pone en peligro la alianza con la centenaria Unión Cívica Radical (UCR), que desde hace meses viene reclamando espacios de poder en un potencial segundo mandato del macrismo.
Quién es Pichetto y por qué vuelve a ser oficialista
Pichetto es senador nacional por la provincia de Río Negro y presidente del bloque del Partido Justicialista (peronismo), aunque en 2016 se alineó al interbloque Alternativa Federal, que componen peronistas críticos del kirchnerismo. Sin embargo, este espacio se desvanece en las encuestas debido a que ha demorado las definiciones sobre su estrategia electoral.
El legislador Pichetto fue además un hombre clave en el Congreso durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, pero desde que Macri asumió el poder viene mostrándose condescendiente con sus políticas y muy crítico del espacio del cual formó parte, al que describe como "el pasado".
No fue ese el único guiño previo al oficialismo antes de ser elegido para la fórmula de Cambiemos. Recientemente, al ser consultado por un medio local sobre a quién votaría en un eventual balotaje entre el kirchnerismo y Macri, Pichetto no dudó en señalar que votaría por el actual presidente.
También reconoció que mantiene con el Gobierno un "diálogo propositivo", y dijo que su mirada sobre los temas internacionales es "muy parecida" a la del jefe de Estado.
Habrá que ver cuál es el efecto de la decisión en el electorado de cara a las elecciones de octubre. Miguel Pichetto no es un hombre que arrastre votos por sí solo. Y el núcleo duro del macrismo podría ver en su figura a ese "pasado" al que tanto temen regresar si el kirchnerismo sale victorioso de la contienda.
Pichetto polémico
El flamante candidato a vicepresidente por el macrismo protagonizó algunos episodios polémicos por sus declaraciones xenófobas y discriminatorias.
En 2013, dijo que el atentado a la mutual judía AMIA "le costó la vida a argentinos de religión judía y a argentinos argentinos que estaban en ese lugar". Tres años después, en 2016, Pichetto afirmó que su país funciona "como ajuste social de Bolivia" y "ajuste delictivo de Perú", porque incorpora "toda esa resaca".
Poco después se metió contra los senegaleses, al afirmar que "ninguno" de los ciudadanos de ese país realiza "actividades lícitas" en Argentina.
El senador también fue acusado de misógino cuando, en el marco de la discusión en el Senado de la reforma previsional, señaló: "Hay mucha gente que no quiere jubilarse a los 65. Por ahí en la casa está la mujer, es mejor quedarse afuera".
Emmanuel Gentile