El Gobierno de Argentina no considera como prioritaria la versión del ataque cibernético como origen del apagón masivo que este domingo dejó sin electricidad a la mayor parte del país, si bien puntualiza que no la descarta.
"En este instante no descartamos ninguna posibilidad. Pero diría que no creemos la del ciberataque. No está dentro de las alternativas primarias que se están considerando", sostuvo el secretario de Energía del país latinoamericano, Gustavo Lopetegui.
En una rueda de prensa celebrada en Buenos Aires, el funcionario explicó que el fallo que causó el corte de energía se produjo en el sistema de transporte del litoral y que tales fallos "ocurren con asiduidad tanto en el sistema argentino como en cualquier sistema de otro país". En este sentido, subrayó que las autoridades no creen que se trate de "algo anormal o extraordinario".
Sin embargo, lo que no es anormal y no debería ocurrir —agregó Lopetegui— es la "cadena de acontecimientos posteriores que causaron la desconexión total". Según precisó, las computadoras que rigen el sistema llevaron a cabo la desconexión "de manera automática" tras detectar cierto desequilibrio, con el fin de evitar "un daño mayor". En este sentido, subrayó que la incidencia no tiene que ver con "una intervención humana".
Lopetegui aseguró que las autoridades tomarán todas las "medidas necesarias" para esclarecer los detalles sobre el origen del apagón con el objetivo de que no vuelva a ocurrir nada semejante. En el marco regulatorio se prevé la aplicación de sanciones contra quienes resulten ser los responsables.