Alrededor de 89 agentes de migración y aduanas de EE.UU. serán enviados a Guatemala, como parte de un acuerdo de dos años firmado por ambos países a finales de mayo para "contribuir a detener el flujo de inmigrantes" que se desplaza en dirección norte, desde Centroamérica hasta el territorio estadounidense.
En una primera fase serán desplegados hasta 49 efectivos, cifra que podría aumentar a 89 en una segunda etapa que concluye en agosto, reporta este martes Reuters.
A través de un memorando de cooperación entre el Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. y el ministerio de Gobernación del país centroamericano, ambas naciones prevén endurecer el paso fronterizo y combatir el tráfico de personas, el narcotráfico y el comercio ilegal de armas.
Como parte de los convenios con EE.UU., también se analiza el uso de pruebas rápidas de ADN, a fin de evitar que las caravanas de migrantes centroamericanos sean aprovechadas para el traslado de menores que hayan sido robados o secuestrados, informó el Gobierno de Guatemala.