El creciente deterioro de las relaciones entre los Estados Unidos y China podría desencadenar una cadena de eventos que harían caer en picada los precios del crudo hasta los 30 dólares por barril, según la compañía de inversiones Bank of America Merrill Lynch.
El presidente Donald Trump, por su parte, podría aumentar los aranceles para los 300.000 millones restantes de las importaciones chinas si no le gusta lo que le diga el presidente chino Xi Jinping en la cumbre del G-20 de este fin de semana en Osaka, supuso en una ruede de prensa Francisco Blanch, el director mundial de productos básicos del mencionado banco, según Bloomberg.
Como resultado, las autoridades chinas podrían dejar caer el yuan, con lo cual el precio del petróleo, en dólares, sería más caro para el mayor importador de crudo del mundo, lo que a su vez detendría el aumento de su demanda, según Blanch.
Pekín también podría ignorar las sanciones de Washington contra Irán y reanudar las importaciones de crudo de ese país.
"El problema comercial y el problema de Irán se convierten en un mismo problema, y eso terminará por generar un escenario con precios del petróleo a 30 dólares por barril", señaló. "Ustedes obtienen dos millones de barriles adicionales de Irán y la demanda se derrumba, ¿a dónde creen que irán los precios?", comentó.
Entretanto, el 12 de junio el precio del crudo tipo Brent cayó en un 20 % desde su valor máximo a fines de abril, a raíz de la guerra comercial desencadenada por la administración de Donald Trump contra China. Posteriormente, las tensiones en el Golfo Pérsico recuperaron esta caída en un 10 %, hasta 66 dólares por barril.