Venezuela anuncia acciones para que EE.UU. rinda cuentas por "los crímenes confesos" contra el país

La Cancillería de Venezuela ha anunciado que emprenderá "acciones firmes" para que el Gobierno de EE.UU. rinda cuentas ante la comunidad internacional por los "crímenes confesos ejecutados en los meses recientes contra el pueblo de Venezuela, su democracia e instituciones". 

A través de un comunicado, el país caribeño reitera que las "restricciones" que Washington ha impuesto "en materia económica y humanitaria" constituyen "una flagrante violación" del derecho internacional así como de los compromisos derivados de la Carta de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

"Es tal el descaro del Gobierno supremacista, que planificó y encabezó ataques contra el Sistema Eléctrico Nacional de Venezuela durante el pasado mes de marzo, como parte de una operación de guerra híbrida que buscaba derrocar al Gobierno constitucional venezolano", señala el texto.

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Sanciones

En el documento oficial, se rechazan las "medidas ilegales" en contra de exfuncionarios venezolanos, con referencia al exministro de Energía Eléctrica Luis Motta Domínguez y al exviceministro de Finanzas e Inversiones de la misma cartera, Eustiquio José Lugo Gómez, sancionados por el Departamento del Tesoro por su supuesta responsabilidad en los "los apagones persistentes en todo el país", por "corrupción masiva, negligencia y mala gestión de la infraestructura eléctrica de Venezuela".

En marzo y abril de este año, Venezuela vivió fuertes apagones generales que dejaron sin energía a casi todo el país. 

Washington ha impuesto sanciones unilaterales a unos 90 altos funcionarios y exfuncionarios del Gobierno de Nicolás Maduro, entre los que se encuentran ministros, autoridades de los poderes públicos, miembros del alto mando militar, de la Asamblea Nacional Constituyente e incluso el propio presidente venezolano. 

De igual manera, la administración estadounidense ha aprobado una serie de medidas económicas y financieras contra Venezuela, como manera de forzar la eventual salida de mandatario de ese país, lo que ha causado pérdidas millonarias, bloqueo de las cuentas del Estado venezolano en el exterior y la imposibilidad de la importación de alimentos y medicinas para la población del país suramericano.