La ola de calor que rompió récords en la costa pacífica de EE.UU., aparentemente causó la mayor muerte de mejillones en al menos 15 años en Bodega Head, un pequeño cabo en la Norte de la Bahía, California.
La coordinadora de investigación del Laboratorio Marino Bodega, Jackie Sones, afirmó a la revista Bay Nature que había encontrado decenas de mejillones muertos en las rocas, con sus corazas abiertas y calcinadas, y el interior bien cocido. Según explicó la científica, los moluscos podrían haber experimentado temperaturas por encima de los 38° C con la marea baja.
Además, Sones contó que había recibido informes de otros investigadores sobre incidentes similares en varias playas a lo largo de aproximadamente 220 kilómetros de costa. La experta considera que la muerte de tantos moluscos podría afectar el resto del ecosistema costero.
"Los mejillones son conocidos como una especie de base. Los equivalentes son los árboles en un bosque: brindan refugio y hábitat a muchos animales, por lo que cuando se impacta a ese hábitat central, afecta a todo el resto del sistema", sostuvo la especialista.
Los años de investigación de la salud de los océanos se han centrado en el aumento de la temperatura del agua y los efectos de la acidificación en la vida marina. Pero hay menos datos sobre los impactos de este proceso en el aire abierto de la costa. Por ello, según señala el medio, hay pocos registros de las plantas marinas y los animales que mueren por el aire caliente.