Un equipo de la cadena de televisión rusa VGTRK estuvo a punto de recibir fuego de mortero por parte de las fuerzas ucranianas en Donbass, en el este de Ucrania.
El corresponsal del canal Andréi Rudenko se encontraba junto con sus colegas en la región para filmar las consecuencias de los bombardeos, cuando una serie de disparos fueron efectuados contra el equipo cerca de la aldea de Aleksándrovka. Ninguno de los periodistas resultó herido.
