El 'superclásico' entre Brasil y Argentina (2-0), jugado este martes en Belo Horizonte y que les dio la clasificación a la final de la Copa América 2019 a los anfitriones, dejó varias imágenes polémicas que pasaron desapercibidas para el árbitro y los asistentes de video, y que podrían haber cambiado el resultado del partido.
Una de las controvertidas jugadas se dio en el minuto 70, cuando el delantero argentino Sergio Agüero aparentemente fue derribado dentro del área rival por un defensa brasileño. El árbitro ecuatoriano Roddy Zambrano no señaló falta y de esa jugada nació el letal contragolpe que acabó en el segundo tanto a favor de Brasil.
Unos 10 minutos después, el mediocampista brasileño Arthur Melo choca con el zaguero de la albiceleste Nicolás Otamendi dentro del área de los locales, impidiéndole ir a por el balón. En ambas ocasiones, el árbitro no revisó el VAR, pero desde la cabina de asistencia tampoco le instaron a que observara la jugada en el sistema de videoarbitraje.
Tras el partido, los jugadores y cuerpo técnico de la selección argentina arremetieron contra el réferi y la Conmebol. "Hay bronca porque hicimos un gran partido. Fue un esfuerzo muy grande que no mereció terminar de esta manera", dijo Lionel Messi, capitán de la albiceleste. "Se cansaron de cobrar boludeces en esta Copa América y hoy nunca fueron al VAR", agregó 'la Pulga'.
Según el futbolista del F.C. Barcelona, Roddy Zambrano "no fue justo" y "faltó el respeto" al combinado argentino con el arbitraje que hizo. "Todas las boludeces se cobraron a favor de Brasil", agregó. Messi también instó a la Conmebol a que "haga algo con este tipo de arbitraje", aunque consideró que el ente rector del fútbol sudamericano no tomará las medidas correspondientes debido a que "maneja todo Brasil".
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