El terremoto de magnitud 7,1, que se registró este viernes en el sur de California, interrumpió el partido de baloncesto entre New Orleans Pelicans y New York Knicks.
Debido al sismo, el encuentro en el pabellón deportivo Thomas & Mack Center (Las Vegas, Nevada) fue suspendido.
El temblor también tuvo lugar durante el juego de béisbol entre Los Angeles Dodgers y San Diego Padres en Los Ángeles, pero el partido no fue detenido.
De acuerdo con el Centro Sismológico Euromediterráneo (EMSC, por sus siglas en inglés), el epicentro del temblor se ubicó a 16 kilómetros al oeste de Searles Valley, a una profundidad de 10 kilómetros. Asimismo, se informa que el temblor provocó más de 15 réplicas.
El terremoto se produce dos días después del sismo de magnitud 6,4, calificado como el más potente en dos décadas, fuera registrado a 12 kilómetros al suroeste de la localidad de Searles Valley. En varias edificaciones se han reportado daños asociados, incluyendo incendios y deslizamientos de tierra.
Asimismo, este 5 de julio, fue registrado en la misma área otro terremoto de magnitud 5,4.