El país insular sobre el que EE.UU. lanzó 67 bombas nucleares registra una radiación mayor que la de Chernóbil o Fukushima
Los niveles de radiación en las islas Marshall, donde Estados Unidos realizó decenas de pruebas nucleares durante la Guerra Fría, siguen siendo altos, incluso de mayor magnitud que en ciertas zonas de Fukushima y Chernóbil (Ucrania), revela un nuevo estudio.
Según informa New York Post, un grupo de investigadores de la Universidad de Columbia tomó muestras en cuatro islas no habitadas de esta zona central del Pacífico: Bikini, Enewetak, Rongelap y Utirik. Las dos primeras acogieron pruebas nucleares entre los años 1946 y 1958, mientras que las últimas fueron sometidas a la radiación de la más potente de las 67 explosiones, conocida como 'prueba Bravo'.
Los resultados de la investigación, publicados en la revista PNAS el pasado lunes, mostraron que la radiación gamma en algunas zonas está muy por encima de los límites establecidos en los acuerdos entre EE.UU. y la República de las Islas Marshall.
En Bikini, las concentraciones de plutonio son de entre 15 y 1.000 veces mayores que en las muestras recogidas en las áreas afectadas por los desastres de Chernóbil y Fukushima.
Los expertos también estudiaron algunas frutas que crecen en las islas y descubrieron que los niveles de contaminación radiactiva en Bikini, Rongelap y las isla de Naen son mayores que los niveles de seguridad establecidos en Rusia, Ucrania, Bielorrusia (países afectados por el desastre de Chernóbil, ocurrido en la URSS en 1986) y Japón (Fukushima, en el 2011).
Algunas muestras incluso excedieron los estándares estadounidenses, que son más leves en torno a la radiación.
"Los atolones del norte, donde se realizó la mayoría de las pruebas de armas, mostraron niveles mucho más altos de radioactividad. El atolón de Bikini tenía niveles significativamente mayores, muy por encima de la mayoría de las normas internacionales para la seguridad de los alimentos", comentó David Krofcheck, físico de la Universidad de Auckland (Nueva Zelanda), a Science Media Centre, recomendando que se investiguen los mariscos locales.
Entre los años 1946 y 1958, Estados Unidos dejó caer 67 armas nucleares en las islas Marshall. La mayor explosión tuvo lugar sobre el atolón de Bikini en 1954 y fue 1.000 veces más potente que la de la bomba lanzada sobre Hiroshima en agosto de 1945.