Visitantes del zoológico de Edimburgo (Escocia) observaron cuando un panda del establecimiento sufrió un inesperado choque eléctrico en la cerca de seguridad que rodea su jaula y huyó atemorizado. Los encargados del lugar dijeron que la barrera solo cumple el papel de mantener a salvo tanto a los animales como al público, informaron medios locales.
El panda Yang Guang llegó hace poco al zoológico y los cuidadores han asegurado que, como todos los animales que allí se encuentran, se acostumbrará rápidamente a evitar las cercas eléctricas.
"Se podría decir que estaba asustado, porque corrió a su guarida. El antiguo recinto tenía vidrio, pero este no lo tiene. Debe ser para evitar que salga, pero es cruel", comentó uno de los asistentes.