La Comisión Selecta del Senado sobre Inteligencia de EE.UU. ha publicado la primera parte de su informe sobre la supuesta interferencia de Moscú en las elecciones presidenciales de 2016, centrándose en "los esfuerzos rusos contra la infraestructura electoral".
Rusia ha negado repetidamente las acusaciones de Estados Unidos de que interfirió en la votación, calificándolas de absurdas y motivadas políticamente.
Del documento se desprende que la comisión no encontró "ninguna evidencia" de que los presuntos esfuerzos del Gobierno ruso dirigidos contra los sistemas electorales estadounidenses hayan cambiado los votos o manipulado las máquinas de votación en los comicios presidenciales de 2016.
No obstante, el organismo asegura haber descubierto que el Kremlin "dirigió una extensa actividad, comenzando al menos en 2014 y continuando al menos en 2017, contra la infraestructura electoral de Estados Unidos", y podría haber encontrado vulnerabilidades para explotar en las próximos elecciones.
Vulnerabilidades en la infraestructura de votación
Por lo tanto, el informe exige prestar más atención a las vulnerabilidades en la infraestructura de votación de EE.UU., dado que algunos de ellos permanecen en su lugar a pesar de la gran atención prestada al tema desde 2016.
"En 2016, la seguridad cibernética para la infraestructura electoral a nivel estatal y local era muy escasa", reza el informe. "Los equipos de votación que envejecen, particularmente las máquinas de votación que no tenían un registro de votos en papel, eran vulnerables a la explotación por parte de un adversario comprometido. A pesar del enfoque en este tema desde 2016, algunas de estas vulnerabilidades permanecen".
Para ayudar a abordar dichos problemas, en 2018 el Congreso asignó 380 millones de dólares en fondos de subvenciones a los estados de EE.UU. para reforzar la ciberseguridad y reemplazar las máquinas de votación vulnerables, señala el informe. El Comité de Inteligencia sugirió que cuando se gasten los fondos, el Congreso debe evaluar los resultados y considerar una asignación adicional.
Mejorar la infraestructura
El informe también ofreció recomendaciones para mejorar la infraestructura de votación de la nación. Por ejemplo, las agencias de inteligencia de EE.UU. deben asignar una alta prioridad a la prevención y alerta de ataques cibernéticos, y el Departamento de Seguridad Nacional debe establecer una mejor comunicación entre el Gobierno federal y los estados.
Asimismo, el Comité recomendó reemplazar las máquinas de votación antiguas por unas más modernas y seguras. El informe sugiere que las nuevas máquinas de votación deben incluir el usos de copias de seguridad en papel verificadas por los votantes (ya que las boletas de papel y los escáneres ópticos son los menos vulnerables al ataque cibernético). También recomienda eliminar cualquier capacidad de conexión inalámbrica en las máquinas.
El comité también se opuso al uso del voto electrónico en Estados Unidos. "Los estados deben resistir los llamados a la votación en línea, ya que ningún sistema de votación en línea se ha establecido como seguro", reza el documento.