Situado a unos 73 años luz de la Tierra, el TOI 270 es un sistema solar que dispone de al menos tres planetas, uno de los cuales probablemente se enmarque en lo que se conoce como zona habitable. Así se desprende del estudio realizado por un equipo internacional de científicos con base en observaciones de imagenes captadas por el telescopio TESS, de la NASA, y publicado el 29 de julio en la revista Nature Astronomy.
Se trata de una estrella enana de tipo M3, alrededor de la cual orbitan un cuerpo celeste rocoso, de diámetro un poco mayor que el terrestre, y dos 'mini-Neptunos' dos veces más grandes que la Tierra.
Dado que la estrella es bastante fría y emite poce luz, y aunque el TOI 270 d, su planeta más lejano, dista de ella tan solo 0,07 unidades astronómicas (UA, la distancia entre la Tierra y el Sol), debería estar en la zona templada. Según las estimaciones de los astrónomos, la temperatura de equilibrio de este cuerpo estaría cerca de los 67 grados centígrados.
Por otra parte, debido a la probable presencia de una densa atmósfera capaz de retener el calor, la vida en TOI 270 d solo sería posible en sus capas más altas.
No obstante, algunas cualidades de los planetas avistados alimentan el entusiasmo de los astrónomos.
Así, la proximidad y la tranquilidad de la estrella convierten el sistema en un objeto de observaciones perfecto, que podrá contribuir al estudio de otros mundos.
"Este sistema es exactamente para lo que fue diseñado el TESS: planetas pequeños y templados que pasan o transitan frente a una estrella anfitriona inactiva, que carece de actividad estelar excesiva", cita un comunicado de la NASA al líder del proyecto, Maximilian Günther, del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés).
"Esta estrella es tranquila y muy cercana a nosotros, y por lo tanto mucho más brillante que las estrellas anfitrionas de sistemas comparables. Con extensas observaciones de seguimiento, pronto podremos determinar la composición de estos mundos, establecer si diponen de atmósferas y qué gases contienen, y mucho más", estimó.
Asimismo, el descubrimiento de dos planetas gaseosos de tamaños cercanos a los de la Tierra, ausentes en nuestro sistema solar, podría contribuir al estudio de la formación de los cuerpos celestes.
"TOI 270 nos permitirá estudiar ese 'eslabón perdido' que existe entre los planetas rocosos parecidos a la Tierra y los 'mini-Neptunos' de gas, ya que todos estos tipos de planetas se formaron en el mismo sistema", cita a Günther un comunicado de la Universidad de California en Riverside.
"TOI 270 es una verdadera Disneylandia para la ciencia de los exoplanetas […] Es un laboratorio excepcional, no por una sino por muchas razones: realmente, cumple todas las expectativas", dijo en otra ocasión.