La crisis política desatada en Puerto Rico, que provocó la renuncia del gobernador Ricardo Roselló tras multitudinarias protestas en su contra, permanece bajo un manto de incertidumbre.
Los integrantes de la Asamblea Legislativa fueron convocados este jueves a una sesión extraordinaria para debatir en torno a la postulación del candidato a suceder al mandatario saliente, el también cuestionado Pedro Pierluisi, pero la decisión se postergó.
El exrepresentante de la isla ante el Congreso de EE.UU. fue nombrado el miércoles por Roselló como secretario de Estado interino, hasta las elecciones de 2020, medida que debe ser refrendada por el Poder Legislativo.
Sin embargo, luego de un tenso debate, el presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, pidió retirar la moción de votación, para que se celebre el próximo lunes una audiencia pública en torno al nombramiento de Pierluisi. Los legisladores quieren hacerle preguntas antes de definir su parecer.
Por otra parte, la Cámara de Representantes decidió realizar también una vista pública, pero el viernes a las 9 de la mañana.
Esto abrió una nueva pugna de interpretaciones. Para el presidente de la Cámara baja, Carlos Méndez Núñez, si se aprueba la nominación de Pierluisi, quien compitió en 2016 en las internas del gobernante Partido Nuevo Progresista (PNP), este se convertirá en gobernador el viernes 2 de agosto a las 5 de la tarde, cuando se haga efectiva la renuncia de Ricardo Roselló.
No obstante, al postergar el Senado la sesión clave para confirmar su nombramiento, algunos señalan que debería quedar como gobernadora la secretaria de Justicia, Wanda Vázquez Garced, quien, consciente de las críticas que despierta su posible designación, ya manifestó que "no tiene interés" en asumir el cargo.
La Constitución de Puerto Rico establece que es el secretario de Estado quien debe sustituir al gobernador ante su dimisión o fallecimiento. Pero, justamente, ese cargo lo ocupaba Luis G. Rivera Marín, quien también debió renunciar por estar involucrado en los chats de contenido misógino y homófobo que dieron inicio a la crisis. La tercera en la línea de sucesión era la secretaria de Justicia, Vásquez Garced, y ante su rechazo Roselló postuló a Pierluisi para reemplazar a Rivera Marín, de forma que asumiera el puesto de gobernador.
¿Conflicto de intereses?
El panorama, de cara a la votación del lunes, se presenta complejo. Tanto la prensa como la opinión pública, reflejada en estos tiempos sobre todo en las redes sociales, señalan posibles conflictos de interés, ya que Pierluisi trabajó como asesor de la Junta de Gobernación Fiscal de Puerto Rico, un ente de control impuesto por la Casa Blanca en 2016. Allí también labora, por ejemplo, su cuñado Andrés Guillemard, abogado y contribuyente del Partido Nuevo Progresista.
El propio líder del Senado, Rivera Schatz, sostuvo que Pierluisi no cuenta con los votos de la mayoría parlamentaria: "Creo que tiene graves conflictos. A mí no me inspira confianza", manifestó.
Así las cosas, buena parte del pueblo puertorriqueño no deja de ver reflejada, en los rostros de los posibles sucesores, la continuidad de un gobierno que, por primera vez en la historia de la isla, debió dar un paso al costado por la presión social. De otra parte, la crisis política expresa una cruenta competencia interna en el PNP por el poder.
La salida de Roselló se dio gracias al protagonismo de un movimiento que, con el impulso en las calles de artistas como Ricky Martin o Bud Bunny, ha logrado deponer al cuestionado gobernador, pero que no tiene líderes vinculados a la política que puedan ocupar espacios de poder como sus verdaderos representantes.
Quién es Pedro Pierluisi
"Jamás pensé que iba a ocurrir lo que ha ocurrido. Ha sido bien doloroso. Ante esta situación tan penosa, yo he decidido dar el frente, no darle la espalda a mi pueblo. Lo que espero es poder culminar muchos de los buenos proyectos que se han estado llevando a cabo", dijo Pedro Pierluisi, el hombre elegido por su antecesor para gobernar a un convulsionado Puerto Rico, en una entrevista concedida el miércoles al diario local Metro.
Lo que ocurrió fue "bien lamentable", pero "ya se le ha juzgado [a Rosselló], al extremo que renunció", dijo. "Y a mí me apena mucho, pero tenemos que trabajar [...] No podemos quedarnos en esa página", señaló el abogado, en el empeño de dejar atrás el escándalo.
Pierluisi, de 60 años, fue comisionado residente en Washington entre enero de 2009 y diciembre de 2014. También ejerció en la isla como secretario de Justicia durante la gestión del padre de Rosselló, el exgobernador Pedro Rosselló (1993-2001).
Nacido el 26 de abril de 1959 en San Juan, Puerto Rico, compitió en la contienda interna del Partido Nuevo Progresista con miras a la candidatura para la gobernación en las pasadas elecciones generales de 2016, en las que fue derrotado por Rosselló (hijo).
Para poder asumir como secretario de Estado, Pierluisi debió renunciar a su cargo en el bufete de abogados O'Neill & Borges, al que había regresado a laborar el 9 de enero de 2017.
Fue miembro del Partido Demócrata, y encargado del comité de campaña en Puerto Rico del entonces candidato a la presidencia de los EE.UU., Barack Obama.
Emmanuel Gentile