Científicos españoles desarrollan un método fotográfico que permite captar espacios ocultos
Un grupo de investigadores, entre los que se encuentran cuatro científicos españoles de la Universidad de Zaragoza, ha logrado desarrollar una nueva técnica de imagen que, combinando hardware de imagen ultra-rápida a un billón de fotogramas por segundo con innovadoras técnicas virtuales, permite ver por primera vez a través de esquinas y captar escenas ocultas en el mundo real, sin las condiciones controladas de un laboratorio. Los resultados de sus investigaciones han sido publicados el martes en la revista científica Nature.
Un proyecto de estos mismos científicos españoles, en colaboración con el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) en EE.UU., ya cristalizó en 2013 en una cámara capaz de capturar luz a un billón de fotogramas por segundo, lo cual permite "aproximar qué camino ha recorrido cada fotón al viajar por la escena, para luego invertir matemáticamente el camino de millones de fotones y reconstruir una escena", según explicó Adrián Jarabo, en una entrevista.
Replantearse "el problema desde cero"
La idea de usar esta tecnología para ver a través de esquinas ya ha sido planteada varias veces en otras iniciativas académicas, pero hasta ahora se limitaba a pruebas con objetos sencillos en laboratorios, sin posibilidades fiables de ser aplicada en condiciones más realistas.
Sin embargo, tal como relata Diego Gutiérrez, otro de los componentes del equipo de Zaragoza, estos científicos se dieron cuenta de que "las cámaras tradicionales no requieren modelos matemáticos complejos para capturar una imagen. De hecho su funcionamiento básico es conocido desde hace unos 200 años".
"Nos replantemos el problema desde cero –añadió Gutierrez– y desarrollamos un modelo computacional que nos permite transformar una pared en una cámara virtual que captura directamente la escena oculta".
Por el momento, el grado de desarrollo de esta técnica permite captar escenas no visibles en medio minuto, aunque dentro de un año, este equipo de investigadores espera ser capaz de "realizar la captura en uno o dos segundos, o incluso menos", según otro de sus miembros, Ibón Guillén.
Mirando al futuro
Las posibles aplicaciones de esta tecnología son múltiples: ámbitos como la seguridad, la robótica, la implementación de vehículos autónomos, o los trabajos en situaciones de rescate podrían verse muy directamente beneficiados por los recientes avances.
De hecho, el propio artículo de la revista Nature recoge el interés del Departamento de Defensa de EE.UU. en esta nueva tecnología, que ha financiado parte de la investigación. Además, la NASA está en proceso de pruebas para incorporar a medio plazo esta tecnología a la exploración remota de cuevas lunares.